La Espiga

Si estás en Valdemorillo, no te puedes perder La Espiga, un restaurante mexicano que está en Pl. de la Constitución, 13. Este sitio es la bomba: tiene un ambiente súper acogedor y un menú variado que va desde raciones de huevos con gulas hasta perritos calientes, todo a precios que no te dejan con la cara de pobreza. Con más de 540 opiniones y un montón de fotos chulas, la peña lo adora y te aseguro que su famosa ración de patatas nunca falla. Así que ya sabes, si quieres disfrutar de buena comida y pasar un buen rato, La Espiga es el plan perfecto.

La carta de La Espiga

Carta del Restaurante

Entrantes:

- Tosta de gulas con gambas

- Huevos con gulas

- Croquetas

- Ensaladilla rusa

- Tortilla de patata

- Tortilla

Platos principales:

- Carne a la piedra

- Morcillo

- Hamburguesa

Bebidas:

- Café expresso

Cómo es la comida en La Espiga

Si estás pensando en dar un salto a este restaurante, aquí tienes el panorama de lo que te espera. La comida no es precisamente un manjar, muchos coinciden en que es mediocre, con un sabor que va de “sin sabor” a “incomible”. Lo único que se salva parece ser la tosta de solomillo, así que no te emociones mucho.

En cuanto a la calidad de las bebidas, si te lanzas a coger una cerveza caliente o un vino blanco normalito por 3,5 €, prepárate para una sorpresa menos grata. Pero hey, si eres celíaco, tienen cerveza sin gluten para ti.

Las raciones están bien de tamaño, pero cuidado: te pueden engañar y servirte enteras sin avisar. Eso sí, algunos dicen que el aperitivo con el refresco está guay, y la paella que ofrecen está muy buena. Las tapas también se salvan, aunque lamentablemente no tenían patatas.

Finalmente, la variedad de la carta es decente. Cuentan con platos para compartir como croquetas, tortilla y ensaladilla rusa, además de un menú variado. Así que, si decides ir, mejor ve con la mente abierta y prepárate para lo que pueda llegar a la mesa.

Cómo son los precios de La Espiga

Si estás pensando en comer en este lugar, prepárate porque los precios son un poco locos. Para empezar, si vas con unos amigos, puedes pillar el plan de 60 € para 4 personas, lo que parece decente, pero luego ves que un tercio te lo cobran a 3,70 € en el centro de Madrid y te preguntas si vale la pena. Comparado con otros bares del pueblo, aquí están más caros, y eso ya te da que pensar.

Hablemos de la comida y las bebidas. Muchos opinan que los precios de los platos van de 10 a 30 €, pero realmente te sientes un poco estafado. Algunos dicen que es caro y excesivo por la calidad que ofrecen. Te encuentras con una Coca-Cola a 2,90 €, y eso ya suena a robo. La relación calidad-precio no es muy buena, y lo que parece un buen plan se convierte en un susto al ver la cuenta.

En cuanto a la transparencia de precios, la cosa no mejora. La gente se queja de que es poca y confusa, y que cuando pides un helado te lo clavan sin avisar.

Cómo es el personal en La Espiga

Cuando se habla del trato en el restaurante, las opiniones son un completo desastre. Muchos se quejan de que es mala y deficiente. No es solo un par de quejas, la cosa va en serio. De aquí no sale bien parado. Pasando a las reservas, hay un lío total. La gente menciona que son no fiables, porque reservan y luego no cumplen. Todas las sillas de la terraza estaban reservadas, lo que es súper frustrante.

Y si hablamos del tiempo de espera, la situación es de lo más variada. Algunos dicen que esperaron 10 a 30 minutos, otros mencionan que ha sido más de 15 minutos para unas simples patatas. Hay quien dice que es rápido, pero la mayoría está del lado opuesto. La gente comenta que se tarda muchísimo y que la espera para recibir la comida se hace eterna. No es lo que esperas cuando tienes hambre.

Cuando tocas el tema de las reservas, la reacción es un desastre. Es como si te dejaran en el aire, porque la gente dice que te informan tarde respecto a la disponibilidad. En cuanto a la atención del personal, esto da para hablar un rato. Hay quienes lo ven como excelente pero variable, y otros han tenido experiencias bien malas. Algunos los definen como poco amables, además de ver a camareros borde y antipáticos, salvo alguna que otra camarera que sí es maja.

Así que, en resumen, si decides ir a este sitio, prepárate para lidiar con toda esta montaña de problemas y expectativas bajas.

Cómo es el local del La Espiga

Si estás pensando en visitar este restaurante, aquí va lo que opinan los clientes. El nivel de ruido es bajo, así que puedes charlar tranquilo, perfecto para una buena conversación. En el piso de arriba, todo está muy tranquilo, ideal si quieres desconectar un rato.

Sin embargo, la limpieza de los baños deja mucho que desear, les ponen un 2 en ese aspecto. Así que ten en cuenta que podría ser un poco asqueroso si te toca ir.

En cuanto al ambiente y la decoración, la mayoría lo describe como agradable. La terraza es el lugar más querido, con un ambiente que te invita a quedarte un rato más. La cocina es tradicional, sin grandes lujos, pero también en algunas partes es muy moderna.

Por último, ojo con la temperatura. La climatización está inadecuada, así que puede que te sientas un poco incómodo si no hay buen clima.

Otros servicios que ofrece La Espiga

Si tienes en mente visitar este restaurante, hay un par de cosas a tener en cuenta. Primero, aparcamiento es un verdadero quebradero de cabeza. Aquí el estacionamiento es complicado y, con frecuencia, no hay plazas disponibles, así que prepárate para buscar un sitio donde dejar el coche.

Ahora, en cuanto a la ubicación, no hay queja. Está en pleno centro del pueblo, justo en la plaza del ayuntamiento, así que si te gusta estar en el corazón de la movida, ¡este es el lugar! La terraza en la plaza es genial para disfrutar del ambiente, aunque, ya sabes, aparcar será un reto.

Por último, si vienes con alguien que tenga movilidad reducida, ten en cuenta que no he visto señales específicas sobre accesibilidad, pero ellos han confirmado que sí hay opciones. Así que, si lo necesitas, mejor pregunta antes de lanzarte a la aventura. ¡Espero que disfrutes la experiencia!